La importancia del sueño en la vida cotidiana

Resumen

El sueño ocupa una tercera parte de la vida de los seres humanos y cicla dentro de un ritmo circadiano. Dormir es esencial para el funcionamiento diario y tiene una importancia fundamental para mantener una buena salud. A pesar de esto, las personas duermen cada vez menos debido a diferentes factores que incluyen actividades económicas, estrés laboral, demanda social, creencias erróneas sobre el sueño, uso excesivo de dispositivos electrónicos, largas horas de trabajo o turnos rotatorios, y tales circunstancias generan condiciones en las que las personas duermen menos de 7 horas al día, pues bien, dormir menos de 7 horas diarias es considerado como restricción de sueño y restringir el sueño solo un par de horas por noche puede llevar al deterioro de la salud y la calidad de vida, produciendo una disminución significativa en el rendimiento cognitivo. Cuando la restricción se extiende a 2 semanas, puede alcanzar niveles de deterioro que son comparables a 2 noches en privación total del sueño, lo que resulta en problemas en la consolidación de la memoria, así como en la alteración de la atención, el aprendizaje y el funcionamiento ejecutivo (memoria de trabajo, flexibilidad cognitiva, automonitoreo, impulsividad, planificación e inhibición y cognición social). Aunque la asociación entre la restricción del sueño y los trastornos de la memoria es bien conocida, la información es insuficiente con respecto a las alteraciones en las funciones ejecutivas, específicamente las de cognición social en sujetos con restricción de sueño. La cognición social implica aquellas habilidades humanas necesarias para interactuar con éxito en un entorno social y según investigaciones recientes, puede verse afectada si las personas no pueden dormir.